viernes, 17 de julio de 2020

¿La dulce...espera?


Y de pronto, sucedió... Un día común, en mi trabajo... 
Todas las mañanas, cuando llegaba a la oficina, ya estaba hirviendo la cafetera a todo lo que da...El olor de café es una sensación maravillosa cuando entras a tu trabajo a las 7am y haces 1 hora en trasladarte...
Pero ese día en particular, abrí la puerta de la oficina y sentí una imperiosa necesidad de vomitar, corrí al baño y sentía que el agradable olor a café me revolvía mi estómago... ¿qué me haría daño? ¿qué cené anoche? No podía dejar de vomitar y sentir unas nauseas espantosas...
Salí del baño temblorosa y me dirigí al área de enfermería...El doctor me vio sonriendo y me dijo: "estas embarazada" ¿qué? claro que no... 
Nadie te prepara para esto!! No podía suceder, me faltaban casi 3 años de carrera y aparte nos estábamos cuidando... Saliendo del trabajo, antes de ir a la universidad pasaría a un laboratorio para hacerme unos análisis de sangre, son mas precisos.
Todo el tiempo me sentí nerviosa, pero no quería marcarle a mi esposo sin embargo él me marcó, tenía que salir fuera de la ciudad por cuestiones de trabajo pero para las 10 pm que saliera de la universidad ya estaría de nuevo conmigo. Le comenté la inquietud que tenía y que iba a ir al laboratorio. Trató de tranquilizarme y quedamos en vernos en la noche, cuando terminaran mis clases.
Salí corriendo de mi trabajo y me fui directo al laboratorio de análisis clínicos, me dijeron que en 2 horas podía regresar por los resultados, me fui a la Uni y regrese tranquila por los resultados, de seguro traía una infección muy fuerte en el estómago.
Me dieron el sobre y lo abrí ahí mismo y vi con letras mayúsculas: POSITIVO.
Mis manos temblaron y sentí como las lágrimas inundaron mis ojos... Estoy embarazada! voy a ser mamá!!!
Cuanto temor sentí en ese momento, cuantas preguntas pasaron por mi cabeza, que poco preparada me sentía para un trabajo tan importante...Caminé rumbo a la universidad y lloraba angustiada y reía imaginado a ese bebe que estaba formándose dentro de mi y volvía a llorar pensando en si sería una buena madre y reía pensando si sería un niño o una niña.
Después de esa noticia, vinieron a mi nuevas pesadillas, migrañas, vómito constante por los siguientes 4 meses y un sin fin de comentarios negativos e innecesarios de parte de las personas que me rodeaban:
"Ahora si, ya deja de estudiar y trabajar y quédate en tu casa", "ya madura, deja de pensar en tu disque desarrollo profesional ya vas a ser madre", mi jefe en el empresa: "¿qué ya se embarazó? hasta aquí llegó, una mujer con hijos ya no es productiva para una empresa" "ya,¿ para qué estudias? con hijos ya  no podrás hacer nada"
Saben que, dolió, y mucho escuchar tanta basura en su momento, pero tengo la gran satisfacción de decirles que nuevamente, tomamos la decisión mi esposo y yo y seguimos adelante con los planes. Seguí estudiando, seguí trabajando y corría de un lado a otro mientras mi pancita crecía cada vez más...
El último mes fue muy angustiante, con los comentarios de mi mamá y su idea de que una mujer es mujer solo si da a luz de manera natural, no por cesárea, eso solo las cobardes lo hacen... Me insistía en caminar para que me pudiera aliviar de manera natural y que se me acomodara el bebé, aún y cuando el ginecólogo ya me había dicho que iba a ser cesárea pues mi baby venía muy grande. Ella siempre insistió que los doctores no sabían nada y hasta cierto punto le creía, pues ella tenía la experiencia de haber tenido 13 hijos, todos nacidos en casa y de forma natural. 
En el último mes di varias vueltas a la clínica por que sentía que ya se había pasado el tiempo, cada vez me regresaban y me decían que no fuera hasta que tuviera contracciones, se rompiera la fuente o sangrara.
Un día me asuste por que mi bebe dejó de moverse, no respondía a la voz de mi esposo ni a la mía y siempre fue muy inquieto. Sentía una tranquilidad en el estómago que me hizo que presintiera lo peor.
Fuimos mi esposo y yo a la clínica y me dijeron lo mismo, que aún no era tiempo, que me fuera a mi casa por que no tenía dolores, ni sangrado ni se había roto la fuente.
Ese día no les hice caso pues yo sentía que algo no andaba bien, así es que como no me hicieron caso, me puse histérica, lloré y grité. Salió un Doctor del consultorio y me cuestionó sobre lo que estaba pasando, le expliqué entre sollozos que ya no sentía moverse a mi bebé y que no me querían hacer caso las enfermeras ni la recepcionista, logré que me pasara a su consultorio y empezó a revisarme. Salió corriendo y le habló a una enfermera, "preparen todo Urgente"!!! la vamos a operar ya trae mal el liquido amniótico". Me asusté y le pregunté que estaba pasando. 
"Tu bebé está bien, ya no se mueve por que ya no cabe en tu pancita, pero ya se pasó el tiempo, ¿por qué no habías venido?" Es neta?? había dado un montón de vueltas y me regresaban.
Me ingresaron al quirofano y me pusieron la anestesia local...estaba ansiosa por verlo... y al fin lo pusieron cerca de mi, era el bebé más hermoso y grande que habían visto mis ojos!!
Pesó 4 kilos con 70 gramos y midió 52 centímetros!!! No podía creer que ese hermoso niño estuviera dentro de mi pancita: mido 1.50 de estatura así es que ya sabrán lo grande que me parecía. 
Pero, ¿por qué estaba de color verde? es verde?!! Ya no supe más de mi, caí en una obscuridad profunda y solo escuchaba las voces de los doctores: me hablaban, me decían que me moviera, que moviera un dedo, que mi bebé tenía hambre y yo lo intentaba, quería abrir los ojos pero no podía...
Sentí como me movían, escuche que el Dr. hablaba con alguien pero yo no podía reaccionar...Caí en un sueño profundo e inquieto, las pesadillas volvieron y no podía hacer nada para despertar...
Al fin abrí los ojos y estaba mi esposo delante de mi con lágrimas en el rostro, me abrazó y me besó con mucha efusión. Supe, después, que había estado muchas horas sin reaccionar por una reacción secundaria de la anestesia.
Mi precioso baby estaba verde porque mi líquido amniótico se echó a perder dentro de mi, pero el color verde desaparecería en unos cuantos días y así fue. 
Nos fuimos a casa y llegaron las visitas a conocer al nuevo integrante de nuestra pequeña familia.
Mamá se acercó y me dijo despacito: "Que bárbara hija, este niño si que esta grande!! ni como pudieras tenerlo de forma natural, yo a Ustedes los tuve todos normal pero por que eran unos ratoncillos, con un estornudo se me salían". 
Que reconfortante fueron sus palabras, si tan solo las madres y padres del mundo supieran el peso que tienen sus palabras, lo que pueden lograr con tan solo una frase, cuidarían más lo que saliera de su boca.
Ese día, cuando nos quedamos solos le pedí a mi esposo, ir nuevamente a terapia y trabajar juntos para ser unos buenos padres, le pedí a Dios que me diera sabiduría pues tenía en mis brazos a un ser divino a un ser que yo como su madre y mi esposo como su padre, lo podíamos formar para ser un ser humano feliz, extraordinario y dichoso de llegar a este mundo y eso no se daba por arte de magia, para eso necesitábamos nosotros como sus padres trabajar primero con nuestro interior, sanar heridas de esos niños que vivían dentro de nosotros mismos, ya que cada uno de nuestros padres nos educaron en base a sus creencias y a sus propias historias, nosotros teníamos la oportunidad de prepararnos y aprender formas nuevas para crear algo nuevo, algo diferente, sin seguir patrones conductuales innecesarios y crear nuestra propia Familia con TODOS sus enredos!!
¡Hasta la próxima! Déjame tus comentarios para saber de que temas te interesa que platiquemos. : )

viernes, 10 de julio de 2020

Los primeros enredos en el paraíso...

Y así, como todo... Terminó la luna de miel!! 
De un momento a otro ya estábamos inmersos en el trajín diario, en las cuentas, en los quehaceres domésticos que nunca terminan, y en los continuos enfrentamientos debido a las grandes diferencias que se fueron intensificando...
                                           
Se pueden imaginar a alguien que no le guste desvelarse los viernes viendo películas? y que guste de despertarse muy fresco a las 6am TODOS los días!!??
qué le pasa a éste hombre? a las 5am o 6am tenía un apetito sexual enormeee y yo no podía abrir bien ni los ojos...
Pero en la noche, al tocar la almohada se quedaba dormido y Yo, con un montón de energía...
En las mañanas no quería café... y yo ADORO el café matutino!!
En las noches-madrugadas moría de frió, mientras él disfrutaba del clima helado... 
Recuerdo los primeros domingos que pasamos juntos: Yo quería dormir a pierna tendida, ya que toda la semana tenía trabajo y escuela,y mi esposo a las 6am ya estaba muy fresco!! besándome y queriendo despertarme...Me llenaba de coraje matutino.
Se levantaba, se bañaba y se vestía como si fuéramos a salir de casa y yo salía de la recámara descalza y con mi pijama, obviamente despeinada, las primeras veces pregunte:"Vamos a salir? vas a algún lado?"y él respondía,"no me arreglé para almorzar"...Asch, perdón!!! 
Pero lo que SI fue la gota que derramó el vaso, fue nuestro choque en cuanto a la economía.
Él venía de una familia promedio, no faltaba comida en su mesa ni los servicios en casa y el no movía ni un dedo para el sustento de la casa de su familia de origen; trabajaba y su salario lo gastaba en sus gustos, comida y regalos para su novia, ropa, perfumes y necesidades básicas de él.
Yo en cambio, si no trabajaba no había comida en casa, trabajaba y aportaba la manutención de mi casa y me pagaba mis estudios desde preparatoria, universidad y posgrado... Tenía el hábito del ahorro y juntar por semana para alguna necesidad o emergencia ya que no tenía a quien acudir en caso de alguna necesidad.
Aún recuerdo, ese primer aniversario de bodas: Cumplíamos 1 mes de casados y el Señor, me mandó un enorme arreglo floral a mi trabajo, no voy a negarlo: me sentí alagada al ver ese enorme ramo de rosas rojas y con una tarjeta que decía"TE AMO!!"Pronto me vino el desencanto cuando dio la hora de salida de mi trabajo y no pude llevarme el arreglo por lo grande y por que iba a la universidad. Al llegar a la UNI estaba en la primer hora clase cuando llegó un mensajero y me entregó otro arreglo de flores... Sonreí por que mis compañeros de salón me hacían borlote y festejaban el regalo pero dentro de  mi: estaba pensando ¿Cuánto se había gastado en rosas? y¿cuánto tiempo me iban a durar ? estuve inquieta el resto del horario de clases. Al fin llegaron las 10pm mi hora de salida y ahí estaba mi esposo, con una enorme sonrisa en el rostro, le sonreí y le dije:"Gracias por las flores!"él sonrió y nos fuimos a casa.
Al abrir la puerta y prender la luz, la sala estaba llena de tarjetas con mensajes románticos, que hermoso se veía!!! Me tenía una cena especial... Yo no podía disfrutar la cena, pensando cuanto se había gastado en un solo día y por 1 mes de aniversario!!
Al fin terminamos de cenar, nos dimos un baño y nos fuimos a nuestra recámara,él me abrazó y me dijo:"Te gustaron las sorpresas??"Le dije que Si, pero no me sentía contenta. Así es que empezamos una gran discusión... ¿Cómo es que se gastó toda su quincena de una manera tan irresponsable? ¿cómo es que yo no agradecía todo lo que hizo él por mi? ¿pero ahora cómo íbamos a completar la quincena? ¿y por qué yo no le regalé nada, cumplíamos 1 mes de casados y no le di ningún detalle? y así seguimos por un buen tiempo, terminamos llorando y enojados... Al poco rato nos acercamos y hablamos más tranquilos, nos fuimos al comedor y sacamos las cuentas de servicios que teníamos por pagar y juntamos mi salario y lo poco que le había quedado a él en su cartera después de comprar tantos "detalles", logramos completar muy apenas los pagos y la despensa de la semana.
Batallamos para ponernos de acuerdo en prioridades en cuanto a gastos, veíamos tan diferente la vida, le preocupaba tan poco el dinero, como si pensara que todo se pagaba solo. y a mi me preocupaba tanto no completar... Fue un gran estire y afloje. Pláticas largas en la sala, haciendo balances juntos.
Le parecía muy exagerada y a mi él muy irresponsable... La realidad es que solo estábamos actuando de acuerdo a lo aprendido desde casa, de acuerdo a nuestros constructos y experiencias desde niños...
Lo hablamos y lo volvimos a hablar muchas veces, hasta que llegamos al acuerdo de que cada semana y cada quincena: juntaríamos el salario de ambos, pagaríamos los gastos y compraríamos la despensa juntos, de lo que nos quedara podríamos darnos el gusto de ir a cenar o a pasear, o simplemente ahorrarlo para alguna emergencia. Pero tuvimos que pasar por varias peleas y quitarnos un poco el orgullo para poder escucharnos y no querer tener la razón en todo.
En cuanto a las otras áreas, nos acoplamos muy bien, a él le gusta cocinar a mi me gusta comer... A mi me gusta ensuciar y a él le gusta limpiar... A mi me gusta desvelarme y a él le gusta dormir... A mi me gusta dormir tarde los domingos a él le gusta levantarse muy temprano... Esos tiempos los aprovechamos para hacer cosas de nosotros como leer, escribir, ver vídeos o equis cosa...
Lo bueno es que ya descubrí el gusto por madrugar los domingos y él disfruta el desvelarse conmigo algunas veces.
Leímos juntos el libro de"Las 4 estaciones del matrimonio"muy bueno y edificador, nos sirvió mucho para la adaptación...
Lo demás,son cosas de la familia y TODOS sus enredos!! hasta la próxima  ; )

viernes, 3 de julio de 2020

La luna de miel!!!

Alguien te ha contado, ¿qué fue lo que paso después de la boda?cuando las luces se apagan, dejas de posar para las fotos, el baile termina...Después de que todos los invitados se van y quedan solamente ustedes dos?? o al contrario ustedes se retiran y dejan la fiesta atrás??ᐈ Luna de miel imágenes de stock, fotos luna de miel en la playa ...
En mi caso, nosotros nos fuimos de la fiesta directo a nuestra nueva casita (les recuerdo que nosotros no queríamos gastar en celebraciones y nos importaba más tener nuestra casa lista con todos los muebles) y como en esa época yo trabajaba y estudiaba no programamos ningún viaje de bodas, solo queríamos llegar a nuestra casa, lejos de todo y todos y comenzar nuestra nueva vida matrimonial... Que emoción se sentía cuando íbamos rumbo a la casa, aún en estos momentos puedo sentir que mi estómago se contrae trayéndome todo el cúmulo de emociones que me llevaban a sonreír y llorar al mismo tiempo.
Volteaba a ver a mi esposo y veía su rostro tranquilo que me sonreía socarronamente mientras tomaba mi mano... Mostraba tanta seguridad y tranquilidad que me llenaba de miedo al pensar que era yo la única que estaba con esos nervios a punto de explotar...
Llegamos a la casa y el abrió la puerta para que pasara... dejamos las maletas apenas entramos y nos tomamos de las manos, mi esposo sonreía  mientras decía: "Gracias a Dios ya estamos en nuestra casa mi amor!!" y me abrazó... Sentí demasiado calor y bochornos, así es que, de prisa me separé y le dije que lo único que deseaba era tomar un baño y acostarme, pues ya no soportaba los zapatos de tacón.
Corrí a la recamara a prepararme para bañarme y me encerré en el baño, le puse seguro (en ese momento no se por que lo hice, ahora si) abrí la regadera y deje que el agua fresca corriera por mi rostro... me bañe con tranquilidad, lavé mi cara quitando todo el maquillaje que acostumbran ponerte las maquillistas profesionales, no me importaba que me viera de cara lavada pues nunca fui amante de andar maquillada, ni de traer nada postizo... Pero entonces, ¿por qué sentía estos nervios que cerraban mi garganta? Mi corazón palpitaba a mil por hora y retardaba la salida del baño lo más que podía...
Al fin, salí envuelta en una toalla y agradecí que mi esposo corrió directo al baño, lo cual me permitió ponerme mi pijama sin preocupación alguna mientras escuchaba la regadera donde mi esposo estaba refrescándose. Peiné mi cabello y mi esposo salió del baño con un short puesto. Se sentó en la cama mientras me veía sonriente. "¿qué lugar prefieres?" me dijo. "¿Derecha o izquierda?" Sonreí y me senté del lado de la cama que escogí para dormir. "Te ves cansada, ¿quieres un masaje en los piecitos?" Le dije que Si, asintiendo con la cabeza, mi garganta estaba seca y sentía que no saldría mi voz si es que intentaba hablar. Me dio masaje en los pies y eso ayudo a que me relajara un poco y empezó a hacerme plática de diversos temas por lo que me sentí poco a poco más tranquila. Terminó y fue a acostarse junto a mi, me acercó hacia él y puse mi cabeza en su pecho, pude escuchar su corazón latiendo fuertemente, sonreí para mis adentros ya que pensé que él no estaba nervioso. Empezó a acariciar mi cabello lentamente y comenzamos a besarnos de manera muy tierna. Ambos habíamos acordado desde nuestro noviazgo que las relaciones sexuales esperarían hasta nuestro matrimonio ya que ninguno de los 2 había tenido una experiencia sexual previa, nos parecía lindo esperarnos a un momento especial. 
Y aquí estábamos los dos, inexpertos, acariciándonos por primera vez y besándonos cada vez con más pasión, el nerviosismo desapareció y le dio el paso a un torbellino de emociones que jamás había sentido, pronto los dos corazones palpitaban al mismo ritmo mientras nuestros cuerpos eran movidos por toda la pasión que llevábamos dentro... De pronto, de la nada... Apareció dentro de mi pecho un sentimiento espantoso, de aversión, dolor, enojo y confusión y en medio de la pasión aventé a mi esposo de mi lado. Recuerdo su rostro de asustado y su mirada llena de terror... "¿qué pasó? ¿te hice daño?" yo solté en llanto y corrí a esconderme al baño. Esa noche despertó en mi algo que estaba dormido, escondido en lo más profundo de mi inconsciente y vinieron muchas noches intranquilas de pesadillas continuas que me despertaban en medio de la madrugada gritando y llorando sin poder controlarme. Mi esposo estuvo ahí, tranquilo abrazándome cuando se lo permitía y alejándose cuando yo necesitaba quedarme sola. A la semana de estos sucesos fuimos a consultar con un ginecólogo quien nos revisó exhaustivamente a ambos, pues pensábamos que teníamos algún problema físico que impedía que consumáramos nuestro relación. El ginecólogo era un hombre de mayor edad y nos dijo con voz calmada que todo estaba bien en nuestro organismo y que no había ningún impedimento para poder llevar a cabo una relación sexual satisfactoria, sin embargo, cabía la posibilidad de que yo tuviera algún suceso traumático que me impedía disfrutar de la experiencia. Le dije que no recordaba nada y me pidió visitar a un psicólogo para ser tratada. Mi autoestima fue golpeada y me sentí avergonzada frente a mi  esposo. Nos fuimos a casa y le comenté que si quería anular el matrimonio lo iba a entender ya que al parecer no le iba a poder responder en el ámbito sexual, él sonrió y me abrazó tierna mente: "Vamos a ir a terapia juntos y vamos a aprender como pareja, no te preocupes lo vamos a superar". Lo abracé muy fuerte y lo amé más que nunca, me aferré a él mientras lloraba con mucha tristeza por todas las cosas que no había podido disfrutar, por todas las situaciones vividas en mi infancia y que estaban repercutiendo ahora en mi matrimonio.
Gracias a Dios, todo fue superado! Fuimos tomados de la mano a buscar un terapeuta, donde encontramos respuestas acertadas y nos orientó para superar la situación. Aprendimos a disfrutar al máximo de nuestra sexualidad con respeto, amor, paciencia y ternura. Pasaron 4 meses para poder consumar nuestro amor, pero fue maravilloso!! 
Ahora, en la actualidad soy terapeuta familiar y tengo la oportunidad de atender muchas parejas con situaciones de conflicto sexual, Si, aún en la actualidad existen muchas personas con poca información respecto a la sexualidad, aún falta tanto por hacer..!! Solo te pido que si tienes alguna duda al respecto, acudas con un especialista de la salud, él te podrá ayudar de manera efectiva, no le preguntes a tu mamá, papá, tía, hermanas, amigas o conocidas ya que ellas te responderán en base a su experiencia personal, la cual desgraciadamente no siempre es positiva y no te darán una respuesta PROFESIONAL que es lo que tú realmente necesitas.
Recuerdo las respuestas que yo obtuve en esos tiempos de parte de algunos conocidos: "Claro que te tiene que doler!!! eres señorita! Así pasa siempre", "Has de estar muy estrecha de las caderas", "Él ha de estar muy dotado!!", "A todas las que son señoritas les duele mucho, de hecho sangran y a veces hasta te da infección donde entre a la fuerza!!" y etc, etc, Todas estas respuestas son mitos, son creencias erróneas pasadas de generación en generación y desgraciadamente aún en estos tiempos hay muchas personas que viven con esa idea en sus cabezas, pasan su vida sin poder disfrutar plenamente de su sexualidad, pero no se atreven a consultar mas allá de su medio ambiente, mas allá de lo conocido.
Agradezco que mi esposo y yo estábamos en una apertura al cambio en ese momento y que el amor que nos unió nos guiaba a buscar soluciones siempre dentro del respeto mutuo. Disfrutamos mucho de nuestro aprendizaje en el ámbito sexual...
Aún recuerdo una noche que terminamos de hacer el amor y caímos en un sueño profundo... De pronto, me vino un recuerdo y lo desperté de manera abrupta, "Amor!! amor, despierta!", él asustado reaccionó, "¿qué pasa amor?" Lo miré retadora y le pregunté: "¿Por qué llegaste tarde a la boda? ¿Crees que ya se me olvidó?" Él sonrió cerrando los ojos, entre despierto y dormido murmuró: "A mi mamá no le gustaba lo arrugado de mi camisa... y se puso a la mera hora a planchar la mía y la de papá". 
Sonreí para mis adentros pensando en el caos que debió haber pasado en su casa ese día y seguí plácidamente dormida. Al final de cuentas era parte de La familia y TODOS sus enredos...
Hasta la próxima!!  ; )
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¿La dulce...espera?

Y de pronto, sucedió... Un día común, en mi trabajo...  Todas las mañanas, cuando llegaba a la oficina, ya estaba hirviendo la cafetera a to...